Esa mujer que tiene la actitud valiente esforzada y constante de participar en la formación integral de su hijo con absoluto amor, ternura , paciencia y entrega
Imaginemos que un bebé de dos meses se despierta a las tres de la mañana, llorando. Su madre se acerca y, durante la siguiente media hora, mama feliz en brazos de su madre mientras ella lo mira con amor y le dice lo contenta que está de verlo, incluso en mitad de la noche. El bebé, satisfecho con el amor de su madre, vuelve a quedarse dormido.
Ahora digamos que otro bebé de dos meses, que también se despierta llorando a altas horas de la noche, es atendido por una madre tensa e irritable, que se había quedado dormida hacia solo una hora después de una disputa con su esposo. El bebé empieza a sentirse tenso en cuanto su madre lo alza bruscamente y le dice ¡Cállate, no aguanto más!. Vamos acabemos de una vez. Mientras da de mamar al bebé, y en lugar de mirarlo, la madre tiene la vista fija en otro punto y rememora la disputa con su esposo, y lo único que logra es sentirse más agitada. El bebé percibe la tensión, protesta, se pone rígido y deja de mamar. “ ¿Eso es todo lo que quieres?” dice la madre. “ Entonces no comas.” Con la misma brusquedad lo vuelve a poner en la cuna y sale de la habitación precipitadamente; el niño se queda llorando hasta que, exhausto, vuelve a dormirse. Leer mas+
Imaginemos que un bebé de dos meses se despierta a las tres de la mañana, llorando. Su madre se acerca y, durante la siguiente media hora, mama feliz en brazos de su madre mientras ella lo mira con amor y le dice lo contenta que está de verlo, incluso en mitad de la noche. El bebé, satisfecho con el amor de su madre, vuelve a quedarse dormido.
Ahora digamos que otro bebé de dos meses, que también se despierta llorando a altas horas de la noche, es atendido por una madre tensa e irritable, que se había quedado dormida hacia solo una hora después de una disputa con su esposo. El bebé empieza a sentirse tenso en cuanto su madre lo alza bruscamente y le dice ¡Cállate, no aguanto más!. Vamos acabemos de una vez. Mientras da de mamar al bebé, y en lugar de mirarlo, la madre tiene la vista fija en otro punto y rememora la disputa con su esposo, y lo único que logra es sentirse más agitada. El bebé percibe la tensión, protesta, se pone rígido y deja de mamar. “ ¿Eso es todo lo que quieres?” dice la madre. “ Entonces no comas.” Con la misma brusquedad lo vuelve a poner en la cuna y sale de la habitación precipitadamente; el niño se queda llorando hasta que, exhausto, vuelve a dormirse. Leer mas+